Para J - Parte 1

Cada vez que entro a una habitación, mis ojos te buscan. No puedo evitarlo. 
Cuando te encuentro, sin que me hayas visto aún, se me dibuja una sonrisa. No puedo evitarlo.
Recuerdo cuándo te conocí, y tu acento me resultaba molesto. A día de hoy, no pasa un día en que no extrañe tu voz. No puedo evitarlo.
Es extraño cuando estamos hablando, y me cuesta controlar los impulsos de cogerte la mano, rodear tu cintura con los brazos, besarte. No estoy acostumbrada, no puedo evitarlo.
Pero qué estúpida me siento siempre que me pasa cualquiera de estas cosas. Meses y meses sin poder sacarte de mi cabeza, invadida por la frustración de no poder tocarte. Echándote de menos cuando no te veo en meses, en un fin de semana, o de un día para otro. Qué estúpida que me siento. Pero no puedo evitarlo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Fracaso

Para J - Parte 2